9/11/08

Yonki, punki, puta, puta, perro, puta, yonki...


Así podría resumir la exposición de García-Alix que estuve viendo ayer en el Reina Sofía. No deja de ser un poco tópica y típica, recoge todos los clichés de La Movida y sus secuelas aunque al desnudo.
A Ociosa no le gustó mucho, pero si váis un sábado por la tarde que no te cobran ni un "leuro" no es un mal plan.
La imagen más alucinante, un tal Antoñito mirando la cámara frente a frente mientras se chuta. La ausencia total de culpabilidad o apasionamiento en sus ojos, sólo captar ese momento reivindica al autor.
Estamos muy ochenteros últimamente...